EL MUNDO DE SOFIA

Todo comienza con una joven llamada Sofía, la cual ella fue a un instituto ella era una chica normal, ella tenía una amiga la cual le contaba todos sus secretos un día Sofía encontró en el buzón una carta, bueno la carta no iba dirigida a Sofía; días después ella encontró otra carta que venía en un sobre amarilla era para Sofía, ella muy asombrada lo abrió, era un curso de filosofía, al empezar a leer, ella vio que los que avían escrito eso eran unos filósofos que se dirigían a Sofía. Estos filósofos le querían dar a conocer el pensamiento de ellos, estos filósofos le contaban a Sofía sobre la visión mítica del mundo ellos decían que avían unos dioses míticos, dioses del amor, de la fertilidad y de los mares o de la belleza, ellos se basaban solo a lo que pensaban, no recibían opinión de otros filósofos y no les gustaba que les llevaran la contraria en cosas que ellos pensaban real o mágico.

Sofía siguió leyendo y vio unas discusiones de algunos filósofos donde ellos discutían sobre la existencia sobre una materia prima externa y universal, un filósofo fue Mileto que el decía que el agua era la fuente de toda vida y que cuando esta se disuelve vuelve al agua, el otro filosofo era Anaximandro este gran filósofo pensaba que todo nace y parece en algo que Anaximandro lo llamo “lo indefinido”; y el otro fue Anaxímedes la opinión de él fue que los dos filósofos tenían la razón, y hubo otro filosofo que fue Parménides, este pensó que todo lo que ha existido siempre era eterno, también afirmaba que nada cambia a pesar de los cambios de la naturaleza Parménides se basaba en el racionalismo, que era la fe en la razón para describir los conocimientos para el mundo.

Hubo otro filosofo que defendió y estuvo de acuerdo con los pensamientos de estos filósofos y él dijo que todo fluye fue Heráclito, él se basaba en un punto, opuesto que es el bien y el mal y también dijo que la razón universal provenía de dios, Empédocles otro gran filósofo unió las dos opiniones anteriores, haciendo una cadena de ideas, y otro gran filósofo Anaxágoras, el no compartió ninguna teoría la cual dijo que un solo elemento ni la de los cuatro elementos pudieran convertirse en sangre por ejemplo, ni el pelo o piel o hueso, a esto Anaxágoras lo llamo semillas.

Sofía oculto estas hojas con el fin de que su madre no lo viera y no le asiera preguntas, días después le llegó otras hojas al buzón y decía, que Demócrito el último gran filósofo de la naturaleza. Defendió la idea de que todo estaba formado por partículas minúsculas a lo que Demócrito lo llamo como “átomos”.